Mantenerse competitivas durante esta crisis que provocó la Covid-19, ha sido un reto para todas las empresas sin duda. Para Femsa no fue la excepción y eligió una nueva estrategia de negocio, hacerle frente al descenso que sufrieron sus ventas.
Aunque no es nuevo, desde el 2012 optaron por crear el concepto Oxxo Súper para incrementar la oferta a sus clientes, este nuevo modelo de negocio plantea tiendas más amplias, mayores servicios y diversidad de productos como verduras y frutas, carnicería, salchichonería y panadería.
Estas tiendas piloto están disponibles en algunas regiones del noroeste mexicano y su función ha sido explorar este negocio para seguir incrementando su oferta de valor de productos y servicios de calidad. Parte de su labor es facilitar la vida a sus clientes con servicios útiles.
Es importante remarcar las diversas categorías de productos que han acercado a sus clientes como la venta de juguetes, artículos tecnológicos o la cantidad de pagos y transferencias que se pueden hacer desde sus cajas. Uno de sus recientes lanzamientos es su Smartphone con un costo de $599 pesos, mismo que ya está a la venta.
La falta de movilidad de sus clientes y el desabasto de cerveza provocaron un decrecimiento del 8% en sus ingresos y las ventas en sus tiendas cayeron 12.4%, en los primeros meses de confinamiento ya que el tráfico de clientes cayó 24.1%. El cambio en el comportamiento de la venta reflejó un incremento de 15.4% ticket promedio en las categorías de consumo en el hogar y productos para atender la pandemia por el Coronavirus.
La cadena Oxxo sigue explorando la viabilidad de las tiendas Súper, debido a la baja rentabilidad en el sector de los abarrotes, ya que competidores como Walmart o Superama ofrecen precios muy bajos, la competencia es muy fuerte para ganarse la confianza de la gente. Por ello el proyecto sigue caminando muy lento, lo siguen estudiando con mucho cuidado para que se convierta en una estrategia exitosa.
VÍA: FORBES MÉXICO