El consumidor mexicano está experimentando diferentes etapas para tomar las decisiones de compra, desde compras proactivas y reactivas para la prevención de contagio, evolucionando a una preparación para la vida en cuarentena antes de volver a la nueva normalidad. Se detecta un incremento en compra de canasta de despensa pandémica, donde la despensa básica, de productos de higiene, así como productos enlatados y para almacenamiento toman fuerza. Debido a este cambio de hábitos, se generó una “economía en casa” donde el consumidor comienza a complementar su vida diaria en el hogar.